lunes, 30 de junio de 2014

Referencias empleadas y sitios de interés

A continuación se presentará una lista de las referencias empleadas para la realización de este blog, incluyendo también enlaces a sitios que pueden ser de interés para los visitantes que deseen ampliar aún más sus conocimientos sobre el tema.



Tratamiento

El tratamiento que se emplee para la disfunción eréctil, depende netamente de las causas que hayan desencadenado dicha afección. 


Si la DE es causada por algún medicamento que esté tomando el paciente, se suspenderá o reemplazará dicho fármaco.
Si la DE es causada por depresión grave, se emplearán fármacos antidepresivos como primera medida.


En el caso de DE por falta de hormonas, se usará algún suplemento hormonal, ya sea en píldoras o inyecciones.
Por último, si esta afección se debe a factores psicológicos, es recomendable acudir a un consejero o terapeuta sexual.

Diagnóstico

Para realizar un diagnóstico de esta enfermedad, los médicos suelen utilizar historia clínica, historia sexual detallada, así como examen físico y otros exámenes básicos, para determinar la causa exacta de la disfunción eréctil que presenta el paciente.
Además, en caso de que sea imposible lograr una erección durante una relación sexual, existen dispositivos especiales que se posicionan en la base del pene para controlar si se ha producido o no una erección durante el sueño.
Si al realizar dicha prueba, se demuestra que el paciente logró una erección, lo más posible es que su disfunción eréctil esté asociada a factores psicológicos. 



Causas

La disfunción eréctil puede ser causada por diversos factores, tales como el uso de medicamentos, principalmente los empleados para tratar la depresión o la hipertensión arterial; factores físicos, psicológicos o comportamentales, entre los cuales se encuentran: abuso de bebidas alcohólicas, tabaquismo, consumo de sustancias alucinógenas, temor a no poder desarrollar una erección, estrés, entre otros. 


Factores de riesgo

Los principales factores de riesgo que se asocian a la disfunción eréctil, son:

  • Edad: la probabilidad de padecer disfunción eréctil y la severidad con que se presente, se incrementan con la edad.
  • Diabetes mellitus: la probabilidad de padecer disfunción eréctil es tres veces mayor en pacientes con diabetes mellitus, en comparación con la población general.
  • Enfermedad cardiovascular: existe una gran relación entre la disfunción eréctil y la presencia de cardiopatías, hipertensión arterial e hipercolesterolemia.

Sintomatología

Un hombre que padece de disfunción eréctil, es incapaz de alcanzar o mantener una erección, y por ende, de llevar a cabo relaciones sexuales satisfactorias.


Aunque la disfunción eréctil (DE) afecta a muchos hombres, no todos presentan la misma sintomatología. Los síntomas principales que puede experimentar un paciente al padecer esta enfermedad, son:

  • No conseguir tener una erección.
  • Lograr una erección, pero que no sea lo bastante firme como para penetrar a su pareja.
  • Lograr tener una erección firme, pero ser incapaz de mantenerla durante toda la relación sexual.



Aspectos anatómicos del pene

En la imagen presentada a continuación, se ilustra una perspectiva transversal de un pene erecto. Además, es posible identificar tres estructuras que presentan forma de tubo. Dos de ellas corresponden a los cuerpos cavernosos, que se ubican uno a cada lado del pene. Y la tercera estructura, corresponde al cuerpo esponjoso, que contiene la uretra.



El estímulo sexual, ya sea físico o mental, hace que se envíen señales para relajar los músculos que se encuentran alrededor de los cuerpos cavernosos, los cuales se llenan de sangre y se expanden, ocasionando una erección.

Después del orgasmo, la sangre abandona los cuerpos cavernosos a través de las venas del pene, con lo cual éste se torna flácido.